Un cliente DHCP obtiene una concesión para una dirección IP de un servidor DHCP. Antes que se acabe el tiempo de la concesión, el servidor DHCP debe renovar la concesión al cliente o bien este deberá obtener una nueva concesión. Las concesiones se guardan en la base de datos del servidor DHCP aproximadamente un día después de que se agote su tiempo. Este periodo de gracia protege la concesión del cliente en caso de que este y el servidor se encuentren en diferentes zonas horarias, de que sus relojes internos no estén sincronizados o en caso de que el cliente esté fuera de la red cuando caduca el tiempo de la concesión.
La primera vez que se inicia un cliente DHCP e intenta unirse a una red, se realiza automáticamente un proceso de inicialización para obtener una concesión de un servidor DHCP:
El cliente DHCP solicita una dirección IP difundiendo un mensaje DHCP Discover.
El servidor responde con un mensaje DCHP Offer proporcionando una dirección al cliente.
El cliente acepta la oferta respondiendo con un mensaje DHCP Request.
El servidor envía un mensaje DHCP Ack indicando que aprueba la concesión.
Cuando el cliente recibe la confirmación entonces configura sus propiedades TCP/IP usando la información de la respuesta DHCP.
Si ningún servidor DHCP responde a la solicitud del cliente (DHCP Discover), entonces el cliente autoconfigura una dirección IP para su interfaz.
En raras ocasiones un servidor DHCP puede devolver una confirmación negativa al cliente. Esto suele ocurrir si el cliente solicita una dirección no válida o duplicada. Si un cliente recibe una confirmación negativa (DHCP Nack), entonces deberá comenzar el proceso de concesión.
Cuando se inicia un cliente que ya tenía concedida una dirección IP previamente, este debe comprobar si dicha dirección sigue siendo válida. Para ello, difunde un mensaje DHCP Request en vez de un mensaje DHCP Discover. El mensaje DHCP Request contiene una petición para la dirección IP que se le asignó previamente. Si el cliente puede usar la dirección IP solicitada, el servidor responde con un mensaje DHCP Ack. Si el cliente no pudiera utilizarla porque ya no es válida, porque la este usando otro cliente o porque el cliente se ha desplazado físicamente a otra subred., entonces el servidor responde con un mensaje DHCP Nack, obligando al cliente a reiniciar el proceso de concesión. Si el cliente no consigue localizar un servidor DHCP durante el proceso de renovación, entonces este intenta hacer un ping al gateway predeterminado que se lista en la concesión actual, procediendo de la siguiente forma:
Si tiene éxito, el cliente DHCP supone que todavía se encuentra en la red en la que obtuvo la concesión actual y la seguirá usando. En segundo plano, el cliente intentará renovar la concesión actual cuando se agote el 50\% del tiempo de la concesión asignada.
Si falló el ping, el cliente supone que se desplazó a otra red y autoconfigura su dirección IP, intentando cada 5 minutos localizar un servidor DHCP y obtener una concesión.
La información de TCP/IP que se concede al cliente, deberá ser renovada por este de forma predeterminada cuando se haya agotado el 50\% del tiempo de concesión. Para renovar su concesión, un cliente DHCP envía un mensaje DHCP Request al servidor del cual se obtuvo la concesión. El servidor renueva automáticamente la concesión respondiendo con un mensaje DHCP Ack. Este mensaje contiene la nueva concesión, así como cualquier parámetro de opción DHCP. Esto asegura que el cliente DHCP puede actualizar su configuración TCP/IP s el administrador de la red actualiza cualquier configuración en el servidor DHCP.