Instalación y configuración del cliente NFS

Como se ha expresado anteriormente, el cliente NFS no requiere ni instalación ni configuración. Los directorios remotos pueden importarse utilizando el mandato mount y el fichero asociado /etc/fstab

En este sentido, recuérdese que en cada invocación al mandato mount (y/o en cada línea del fichero /etc/fstab) se pueden establecer opciones de montaje. En ellas se particulariza el comportamiento que tendrá el sistema de archivos una vez se haya montado en el directorio correspondiente. En el caso de NFS, las opciones más importantes son las que gobiernan el modo de fallo de las peticiones remotas, es decir, cómo se comporta el cliente cuando el servidor no responde:

  1. soft. Con esta opción, cuando una petición no tiene respuesta del servidor el cliente devuelve un código de error al proceso que realizó la petición. El problema es que muy pocas aplicaciones esperan este comportamiento y ello puede provocar situaciones en las que se pierda información. Por tanto, no es aconsejable.

  2. hard. Mediante esta opción, cuando el servidor no responde el proceso que realizó la petición en el cliente se queda suspendido indefinidamente. Esta es la opción que se recomienda normalmente, por ser la que esperan las aplicaciones, y por tanto más segura desde el punto de vista de los datos.

    Esta opción se puede combinar con la opción intr, que permite matar el proceso mediante el envío de una señal (de la forma tradicional en Linux).

A continuación se muestra un ejemplo, en el que se presenta la línea del archivo /etc/fstab(de la máquina faemino) relacionada con el ejemplo de la “Acceso a directorios remotos mediante NFS”:

#device                mountpoint  fs-type  options    dump  fsckorder
...
cansado:/home/ftp/pub  /mnt        nfs      defaults   0     0